El pasado jueves, cien niños y niñas de la comunidad de Membrillal, corregimiento de Pasacaballos, fueron partícipes de una jornada llena de juegos, diversión y sonrisas.
Esto, durante una jornada de voluntariado ejecutada en el comedor infantil de esta vereda, ubicada en la Zona Industrial de Mamonal, al suroccidente de la ciudad de Cartagena.
Estos cien niños, parte del comedor infantil impulsado por la Fundación ZF La Candelaria y apoyado por el Banco de Alimentos de la Arquidiócesis de Cartagena, vivieron una tarde llena de juegos, aprendizaje y mucha diversión.
Durante ella, los infantes hicieron manualidades para expresar sus sueños y deseos; se entretuvieron con juegos de mesa, y compartieron sus ideas con los demás. Todo en un espacio en el que alzaron su voz y desarrollaron sus habilidades sociales al pasar tiempo con sus amigos y vecinos.
Estas actividades fueron coordinadas por un grupo de veinte voluntarios de la empresa Gestión Cargo.
Los colaboradores de esta organización, perteneciente al grupo Nutresa, no solo aportaron su gran alegría y empeño junto a los niños y niñas de esta vereda; sino que también impulsaron a la continuidad del desarrollo de estos cien niños a través de una gran donación de alimentos y su invitación a otras empresas a hacer parte de esta iniciativa.
Así lo expresó Sahira Díaz Támara, del equipo de Gestión Cargo; que tras su invitación a participar de estas actividades, sostuvo que las mismas “aportan un granito de arena a la comunidad de Membrillal.”
La donación de esta empresa, hecha a través de la mediación del Banco de Alimentos de la Arquidiócesis de Cartagena, aporta al funcionamiento del comedor colindante con la Institución Educativa San Francisco de Asís, Sede Membrillal. Centro de formación del cual proviene un gran porcentaje de estos niños.
Este lugar, habilitado también para otros espacios como la capacitación de miembros de la comunidad, alimenta a esta población durante dos días a la semana. Sin embargo, junto al impulso de Luz Maide Ávila – la delegada principal de la Junta de Acción Comunal de Membrillal – y colaboradores como Zona Franca La Candelaria, Fundación ZF La Candelaria y el BAAC, luchan por el funcionamiento de este comedor durante cinco de los siete días de la semana.
De este modo, también se hace una invitación a muchas más empresas que hacen parte de Zona Franca La Candelaria a aportar su granito de arena a esta noble causa. La cual, poco a poco, aporta a la nutrición y el crecimiento de los cien niños que se ven beneficiados por ella.
Desde el Banco de Alimentos de la Arquidiócesis de Cartagena, agradecemos la labor y el buen corazón de los miembros de Gestión Cargo, Grupo Nutresa, Zona Franca La Candelaria y Fundación ZF La Candelaria. Quienes aportan a la lucha contra el hambre en esta zona de la ciudad y, con esta alianza, se refuerzan como Donantes BAAC. Un vínculo ha dado frutos a lo largo del tiempo gracias a su generosidad.
¡Juntos construimos una muralla contra el hambre!